Claves de éxito en una entrevista laboral
Históricamente las entrevistas de trabajo se han considerado un evento de gran importancia que puede producir ansiedad y estrés. Por ello las entrevistas suelen ser la primera experiencia en este terreno y son fundamentales para ganar experiencia y seguridad en la primera etapa de la vida profesional.
Considerando esto, resulta indispensable prepararse muy bien para las entrevistas, evitar factores que te hagan sentir inseguro y aprovechar la oportunidad para entrenarte y aprender.
La preparación lo es todo
Lo principal es que durante la entrevista te sientas seguro, esto no quiere decir que no sientas nervios, pero saber que te has preparado ayudará a disminuirlos y así poder triunfar en tu entrevista.
El contacto esperado
Si estás en una búsqueda activa procura siempre llevar un registro de las vacantes a las que has aplicado o de las empresas a las que has contactado. Esto te ayudará mucho para que no olvides o confundas los procesos en los que te encuentres.
Es posible que al inicio no estés en muchos procesos al mismo tiempo pero te pueden contactar de un par de empresas y es mejor no confundirse.
También es posible que aunque te contacten de una sola empresa, no recuerdes algún dato importante que te puede ayudar a destacar en el proceso.
Por ello te recomendamos crear un documento en el que lleves el registro de tus candidaturas con todos los datos que consideres valiosos. Por ejemplo: nombre de la empresa, sector, posición a la que aplicas, persona de contacto, alguna característica de la vacante que consideres relevante.
Puede ser que el primer contacto sea directamente una llamada, entonces poder acceder a este documento de forma rápida puede ser clave para entender todo lo que te digan.
La convocatoria a la entrevista
Puede que te convoquen a través de llamada o de un email, por lo que te recomendamos estar al pendiente de tus llamadas y tu correo (especialmente de la bandeja de SPAM).
Cuando te convoquen a la entrevista muéstrate receptivo e interesado. Intenta obtener toda la información posible sobre la entrevista:
¿Quién te entrevistará?
¿Será el / la jefe/a, será alguien de Recursos Humanos, será la persona encargada del área?
¿Requieren que lleves algún documento ese día? ¿Te realizarán alguna prueba técnica?
No exijas las respuestas pero sí pregunta directamente para evitar confusiones.
Si consigues saber el nombre de tu entrevistador/a podrás buscar su perfil en internet y conocer un poco más sobre su formación profesional y su rol en la empresa. Esto te ayudará a comprender mejor ante quién estarás ese día. Además considera que la otra persona ha podido saber de ti a través de tu currículum y de esta forma tú no llegarías en cero. Si te realizaran alguna prueba técnica podrás repasar previamente para disminuir los nervios.
Sobre la empresa
Ahora sí, es momento de informarte a fondo sobre la empresa.
Conoce su misión, visión, sus valores y objetivos. También indaga en los proyectos de los que forma parte. Toda la información que recibas es útil para que puedas desarrollarte durante la entrevista.
Aunque la empresa esté buscando una posición, necesita ver interés real por parte del candidato/a. ¡O sea tú! Así que demuestra que sabes sobre la empresa y que por ello te interesa la vacante.
Además si puedes obtener información sobre el departamento al que aplicaste será más sencillo hablar sobre tus conocimientos enfocados en ello.
Practica la entrevista previamente
No permitas que los nervios se apoderen justo antes de la entrevista.
Practicar es de mucha ayuda para que te sientas seguro/a y preparado/a ese día. Puedes pedirle a alguien de confianza que te ayude simulando ser el entrevistador. También puedes practicar frente al espejo las veces que sean necesarias.
Antes que nada piensa cómo contarás tu desarrollo académico, cuáles son tus habilidades y motivaciones. Puedes contar alguna experiencia puntual que sirva para ejemplificar tus competencias, escógela bien y practica para que no te líes en el momento.
También puedes incluir experiencias o proyectos realizados aunque no sean del sector. Es decir, si trabajaste como monitor/a o fuiste camarero/a, puedes mencionarlo, esto demostrará que sabes estar en un entorno laboral.
Y si no has trabajado, seguramente has realizado algún proyecto académico que te ha permitido desarrollar habilidades como el trabajo en equipo, así que no lo descartes.
Finalmente lo más importante es que muestres interés y buena actitud durante la entrevista.
Recuerda que aunque no es un puesto formal de trabajo es tu oportunidad para obtener experiencia y, posiblemente, alguna oportunidad laboral a futuro.
¡Así que prepárate con estos consejos y mucho éxito en tu entrevista!
